Sosteniendo la teatralidad en tiempos de pandemia

Por Patricia Galeano

Nombre, pieza de teatro audiovisual que retrata -en líneas generales- la problemática de la trata de mujeres en nuestro país, fue creada por la compañía Enborrador... Teatro en Construcción, dirección y dramaturgia de Paola Irún y con dirección audiovisual de Juanma López Moreira presentada en Paraguay por vez primera el pasado 12 de marzo gracias al Centro Cultural de España Juan de Salazar luego de su paso virtual por el conocido Festival Internacional de Teatro Santiago a mil en Chile; conformado por un gran equipo técnico y con las actuaciones de: Sonia Amarilla, Lía Benítez Flecha, Florencia Bonzi, David Amado Cañete y la propia Paola Irún.

"Contemporáneo es aquel que mantiene la mirada fija en su tiempo, para percibir, no sus luces, sino su oscuridad. Contemporáneo es, justamente, quien sabe ver esa oscuridad, quien está en condiciones de escribir humedeciendo la pluma en la tiniebla del presente. Contemporáneo es aquel que percibe la oscuridad de su tiempo como algo que le incumbe y no cesa de interpelarlo". (Agamben, 2010 )

G. Agamben

La pandemia en el 2020 nos mantuvo aislados, distanciados y con los teatros cerrados, lo que obligó de alguna manera a todes les artistas del mundo - para seguir creando y trabajando- a adecuar las prácticas escénicas a las plataformas virtuales con las que contamos hoy: al teatro grabado, a la experimentación y exploración de nuevos leguajes, a la fusión de la teatralidad con leguajes audiovisuales y un sinfín de propuestas que se realizaron dentro de este contexto. Surgió de esta manera un nuevo formato diverso que no es teatro ni cine -ya la historia se encargará quizá de nombrarla y especificarla- pero que ante la coyuntura social actual parece haber llegado para quedarse.

Dentro de este contexto surge en nuestro país la versión audiovisual de Nombre, y debo decir que a pesar de una cierta apatía y negación como espectadora de este tipo de propuestas, -como quizá toda apasionada del teatro y su presencialidad- esta obra me sorprendió de sobre manera, ya que consiguió emocionarme y atraparme de principio a fin dentro de esta nueva experiencia teatral-audiovisual. Una obra con un cruce interdisciplinar tan propio, tan competente para estos tiempos y tan representativa de nuestra época, de la forma en que nos tocó reinventarnos para no dejar de hacer teatro; un espectáculo artístico tan contemporáneo y lleno de actualidad que para mí logra lo que alguna vez sugería Artuad en medio del caos de su tiempo:

"En el periodo angustioso y catastrófico en que vivimos necesitamos urgentemente un teatro que no sea superado por los acontecimientos, que tenga en nosotros un eco profundo, y que domine la inestabilidad de la época". (El teatro y su doble, 1947). 

El espectáculo inicia con un prólogo homenaje al desaparecido actor Rubén Vysokolán de la mano de su propia hija Lou Mei Vysokolan en un pequeño recorrido por el barrio La chacharita- Punta karapa que en medio de diálogos con los vecinos sobre el artista llegan al "el agujero de Vysoka" lugar donde residía el actor y espacio donde se desarrolla toda la magia de la representación.

Básicamente la obra dramatiza la historia de: Rossi y Jessi, que representan a las jóvenes mujeres que por su afán de conseguir trabajo son engañadas y terminan siendo explotadas sexualmente en las periferias del país; Antonio Ledesma un policía que mantiene relaciones íntimas con Jessi que tras la muerte de la misma y ante la decidía e inexistente labor policial en el caso, decide lanzarse a la aventura de buscar justicia; y en medio de esto se encuentran Toña, que interpreta a la persona que capta y engaña a las jóvenes así como alguna vez le hicieron a ella, y su reencuentro con Paco, artista de calle con quien tiene una historia anterior.

El relato se desarrolla de forma no cronológica como piezas individuales, entre idas y vueltas sobre los diferentes personajes de a poco se va descubriendo o revelando la ficción que el espectador debe reconstruirla. Con un buen uso del suspenso que hace que nos mantenga concentrados/as por su narrativa no lineal y con una tensión persistente generada por las ascuas de la incertidumbre.

El drama ficcional se va ver interrumpido constantemente de la mano de Paco -en unos intervalos en medio de las piezas- este personaje que no define sexo, convertide en todo un arlequín, la obra va jugar a mostrar el artificio, con diálogos a la cámara de forma directa, a presentar de forma literal a los/las músicos/cas y a los/las camarógrafos/as que acompañan la representación. Nos muestra la teatralidad dando pie a una dualidad histórica que se cruzan todo el tiempo: por un lado la acción propia del drama y por otro la acción real del acontecimiento teatral, descripta incluso por este mismo personaje ficcional que se va referir a la obra de manera autorreferencial y se va tomar la molestia de explicarnos con teoría teatral lo desarrollado en la escena.

Este juego permanente entre teatro de representación y teatro de presentación -como diría De Marini- donde este último, es utilizado como intervalos que detienen la acción del drama y que nos induce a reflexionar sobre los hechos desarrollados, sobre el acontecer histórico, a llenar los vacíos o saltos en el tiempo y nos ayuda a calmar un poco de esa adrenalina rítmica en que nos mantiene el drama ficcional; nos incita no solo a abandonar la secuencia del relato sino abandonar el universo del teatro para volver a nuestro propio mundo particular de espectadores, a volver a lo real.

El espacio "La Casa de Vysoka" inserto en uno de los barrios más populares del país imprime una energía propia que es tomada y asimilada como parte del espectáculo recordando también desde este lugar la irrupción de lo real como juego constante. Es un espacio vacío pero lleno de energía propia de antemano, de sonidos característicos y típicos del lugar que va convivir y comulgar con la energía de la representación. Un lugar que va ser utilizado en todas las direcciones en todas sus posibilidades y que al igual que los pocos objetos que aparecen en la obra se van a ir resignificando todo el tiempo.

Las tres cámaras en un plano continuo (con algunas ediciones según especificó el director) va mostrarnos y acompañar a los/las personajes y el desarrollo de los acontecimientos; una gran labor del mismo que con gran intuición y sensibilidad artística supo decidir y mostrarnos con las mejores tomas y ángulos lo que teníamos que ver, adaptándose a la propuesta de la obra que mantiene con ahínco, de la mano de su gran directora y dramaturga, sus propios signos de teatralidad como bandera indiscutible.

Referencias bibliográficas:

• Agamben, G. (2010). ¿Qué es lo contemporáneo? En Desnudez. Anagrama. Barcelona.
• Sánchez, J. A (2007) "Teatros y Realidad" en Prácticas de lo real en la escena contemporánea, Madrid, Visor.
• Sagaseta, Julia Elena "Intromisiones, cruces, relaciones entre lo ficcional y lo real" en Territorio Teatral, n°3, https://territorioteatral.org.ar/html.2/dossier/n3_02.html
• Ubersfeld, Anne. (1998) Cap V: El teatro y el tiempo en Semiótica teatral. Catedra. Madrid.
• Feral, Josette. (2003)"La teatralidad". En Acerca de la Teatralidad, Cuadernos de Teatro XXI. Nueva Generación. Buenos Aries.
• Féral, Josette. (2004). "La teatralidad: en busca de la especificidad del lenguaje teatral" en Teatro, teoría y práctica: más allá de las fronteras. Buenos Aires: Galerna.
• De Marinis, Marco. (1982) Cap. 2 "El texto espectacular" En: Semiótica del Teatro. L analisis testuale dello spettacolo.Milano: Bompiani. Pp.60-70. Traducción de Gerardo Camilletti para la Cátedra "Análisis de textos dramáticos y espectaculares" UNA-2001.